domingo, 1 de abril de 2012

Catalunya, ese tranquilo oasis...

La Massachussets de Europa, dijo hace días el Presidente Mas. Ja.

La Holanda del Sur, les gusta pensar a muchos. Ja, ja y ja.

Si miramos temas aparentemente importantes (aunque luego en la práctica importan un bledo), cosas así como el civismo y tal, somos la Grecia del Oeste. Y no, amigos de los lanzapiedras, eso no es bueno.

Si comprobamos los índices económicos y las referencias de analistas internacionales sobre confianza en nuestra capacidad productiva y de endeudamiento, la cosa ya da risa floja, porque nos volvemos la Uganda del Norte. Y no, amantes de los cócteles molotov, eso no es naaaada bueno.

Pero nosotros, a lo nuestro. A seguir soñando con esa gran nación pancatalana que, como la Francia clásica (Desde luego tampoco la de Sarkozy) sea remanso de paz y luz del mundo. Ja, ja y rejá.

Mientras tanto, eso sí, el Conseller Lluís Recoder pasando unos días en Las Vegas, vendiendo el alma al diablo, y, de manera más prosaica, la comarca entera del Baix Llobregat a palmos, para que ese prócer de la humanidad llamado Mr. Adelson nos convierta en una versión siglo XXI de la Cuba del Carnicero Machado...

No, amigos incendiarios de Starbucks, así no cambiaréis nada. Las cosas se cambian desde dentro.

La foto que ilustra el artículo, una de las miles sobre los disturbios en Barcelona el pasado día 29.

3 comentarios:

Co dijo...

Que tristeza que pasen estas cosas Jan. Acá en mi país es moneda corriente la huelga, la violencia, los destrozos. Y si, muchas veces protestan por buenas causas porque en este lugar, para que se respeten los derechos de los ciudadanos, hay que salir a manifestar. Pero no, no y no, La violencia no es un camino a seguir. Ni acá, ni en Catalunya ni en la china. Ya sobradas muestras tenemos de las consecuencias que generan!

pseudosocióloga dijo...

Lo de las Vegas me supera.

Misaoshi dijo...

Yo todavía flipo con lo que luchan por tener un Las Vegas en Madrid o Barna. Y que la gente piense más en el dinero que en las consecuencias: robos, MÁS turismo no deseado, más mafias y violencia...

A mi me da miedo. Y sí, vendrán ricos a dejarse la pasta (para hacer a otros más ricos), pero que cambien las leyes para que entren menores, ludópatas, gente enferma de la cabeza, etc... ¿qué mierda es esta?