domingo, 3 de julio de 2011

¡No nos merecéis, cabrones!

No os merecéis que, habiendo desarbolado mi Equipo hasta reducirlo esta noche a solo cuatro personas, saquemos el trabajo de los siete que debiéramos ser.

No os  merecéis que Areala, encontrándose mal y habiendo vomitado un par de veces, siga al pie del cañón, trabajando entre viaje y viaje al baño, empeñándose en hacernos creer que se encuentra perfectamente, solo porque su pundonor y vergüenza profesional le impiden marcharse y dejarnos con el culo al aire.

No os merecéis que, habiendo despedido esta misma semana a una enfermera que cumplía perfectamente sus funciones con la excusa de su “escasa experiencia clínica”, haga Nena su trabajo, el de enfermera, quiero decir, sin serlo, y sin tener por tanto NINGUNA experiencia clínica. Y encima lo haga bien.

No os merecéis que la buena voluntad supla siempre la escasez de medios y recursos, que seamos nosotros los trabajadores, a nuestro pesar, quienes saquemos adelante el servicio cuando vosotros en vuestra supina estupidez lo planificáis mal o lo reducís hasta lo imposible.

No, no os lo merecéis.

Pero el mercado laboral está como está.

Así que todos, yo el primero, nos comemos nuestra dignidad y nuestro orgullo y tiramos hacia delante con carros y carretas y con toda la mierda que queráis cargar en ellos. Y lo sabéis, vaya si lo sabéis, y os aprovecháis, vaya si os aprovecháis.

Cabrones.

No nos merecéis.

5 comentarios:

la reina del mambo dijo...

Siempre nos toca a los mismos cargar con lo malo!
No te amargues amigo.
Un beso

Anónimo dijo...

Así están las cosas, es una mierda pero... en el límite nos encontramos.
Saludos!

pseudosocióloga dijo...

¿Y no tiene visos de arreglarse?
De todos modos yo soy de las que creo que el que la hace la paga y que a todo cerdo le llega su San Martín y que solo hay que esperar en la orilla pacientemente para ver el cadáver de tu enemigo flotar, y que todo cae por su propio peso, y, y, y...que paciencia.
Al menos vosotros podeis dormir con la conciencia tranquila.

Co dijo...

Ay Jan! Que tristeza tus palabras. Es increíble como la gente sin escrúpulos se aprovecha de la buena voluntad y la necesidad de las personas sin ningún tipo de pudor. Debe ser muy difícil la situación que están pasando en el trabajo pero quédate tranquilo que todo vuelve en esta vida. Ya vendrán tiempos mejores y esos directivos aprovechadores las pagarán.
A todo esto, no hay forma de hacer una especia de reclamo entre todos los compañeros?

Te mando un beso grande y ánimo!

A todo esto, ¿cómo marcha la convivencia con Elma?

Lakacerola dijo...

Te diría lo mismo que te dije en un comentario anterior, pero me repetiría y no quiero. Estas cosas me cabrean y mucho contra todos aquellos que hablan de privatizar. Cuando pase una desgracia entonces nos acordaremos.
Te he dejado un premio.
Bsos.